Recuerdos de una guerra. El debe y el haber
El que suscribe no es sospechoso de nada y nunca ha ocultado la franja morada que lleva cosida en el corazón, por lo que se siente libre de decir lo que cree verdad y juicioso en el asunto de la memoria histórica.
Poca cosa puede tener un país más importante que su historia, por lo que es justo y necesario que esa historia pase de generación en generación sin caer en lecturas parciales e interesadas. Durante muchos años la historia de la Guerra Civil fue explicada como quisieron los que la ganaron, por lo que ya es buena hora de que ese cuento que intentaron colarnos sea subsanado y reescrito acorde con lo que en realidad sucedió. Por lo tanto, estoy de acuerdo con que hay que revisar todo lo acontecido y hay que intentar compensar a quienes fueron humillados por aquellos que, no lo olvidemos, se levantaron contra un estado legalmente constituido. Además, estoy seguro de que eso no traerá, como auguran algunos manipuladores del miedo, una catastrófica división entre los ciudadanos, al menos no más honda que la división inherente (y en cierto modo maravillosa) al propio concepto de nuestro estado, el de las dos españas.
Lo único que este humilde españolito pide es que no caigamos en el error de aquellos a los que criticamos y que seamos lo suficientemente valientes como para llamar a las cosas por su nombre y reconocer que los que perdieron también derramaron sangre innecesaria y disfrazaron con la bandera republicana verdaderas barbaridades y atentados contra la dignidad y la vida.
Si conseguimos llamar al pan, pan, y al vino, vino, el que suscribe se sentirá aún más orgulloso de pertenecer a un estado en el que se aprende de los errores y se acepta la contradicción de la propia existencia, lo bueno y lo malo de cada uno, y en el que no nos tiembla el puño al escribir sobre nuestra memoria tanto el debe como el haber.
2 comentarios
El hombre del sombrero -
El Sombrerero Loco -
Si mi tendencia a divagar nubla el propósito de este comentario lo sentiré mucho, pero coincido en la opinión por ti expuesta y si bien es un despropósito la canonización del comportamiento de uno u otro bando durante un conflicto, considero que pueda serlo también la justificación que se quiera dar a ese comportamiento, antes y después del mismo. Es un hecho que los vencedores siempre escriben la historia y cuando éstos son vencidos sus contendientes toman el relevo y siempre, siempre, hay gente dispuesta a escribir su renglón y a rajar del que quieren escribir los demás. ¿Ha preguntado alguien a la Historia por su opinión?
Espero no haberte molestado en mi intromisión en éste, tu blog, para hacerme partícipe del mismo y me permitas alguna que otra visita siempre que la ocasión lo permita. Me queda tan solo desearte buena suerte en esta nueva aventura en la que partes con tu amigo el hidalgo del sombrero y que disfrutes de todo el tiempo que pases con el.
Un abrazo,
El Sombrerero Loco.